Los vertidos ilegales se multiplican en el entorno de Rivas: la situación es «crítica»

Vertidos ilegales tras la Casa de Asociaciones de Rivas (©Diario de Rivas)

Los vertidos ilegales que jalonan la zona limítrofe entre Rivas Vaciamadrid (barrio Oeste) y Madrid capital (distrito de Vicálvaro) continúan imparables. A pesar del cierre de algunas vías, quienes tiran todo tipo de residuos en la zona sin control encuentran nuevas maneras de acceder a este entorno. Diario de Rivas recorre la zona con la asociación Rivas Contaminación Zero y habla con distintos responsables políticos para conocer la situación actual y los planes para solucionarla.

La zona situada tras la Casa de Asociaciones, en el entorno entre el barrio de Covibar, la Cañada Real y la M-50, ha alcanzado una situación «crítica», según alerta Rivas Contaminación Zero. Según pudo comprobar este diario, las basuras de todo tipo se han incrementado de forma exponencial, sumándose a las que ya existían en este entorno.

A pesar de que han sido cerrados al tráfico rodado varios accesos (uno que atravesaba la M-50 y otro junto al colegio Mario Benedetti), los vehículos todavía pueden entrar hasta allí a través del Camino del Santísimo. El resultado es que, en los últimos meses, se han acumulado cientos de kilos de materiales adicionales, entre ellos algunos peligrosos, como frigoríficos a medio desguazar, plásticos, fibra de vidrio, cristales, material de oficina, productos electrónicos o incluso un enorme bidón con una sustancia aceitosa de aspecto altamente inflamable —este último, ya retirado— que aún presentaba las etiquetas de una compañía dedicada al tratamiento de residuos.

VÍDEO: Vertidos tras la Casa de Asociaciones de Rivas (Rivas Contaminación Zero)

Otra de las zonas en las que se han incrementado los vertidos es la confluencia entre la Cañada Real y la A-3: la autovía está bordeada en este punto por residuos de todo tipo, visibles desde la carretera.

VÍDEO: Vertidos entre la Cañada Real, la A-3 y la M-50 (Rivas Contaminación Zero)

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En cuanto a la zona comprendida entre la carretera de Vicálvaro (M-203) y la M-50, cientos de frigoríficos desguazados se acumulan en una vaguada que discurre paralela a esta última autovía. Además, a pocos metros se amontonan también cientos de residuos, entre los cuales se encuentran televisores y material electrónico, escombros, cristales, etcétera.

VÍDEO: Vertidos en el entorno de la M-203 (Rivas Contaminación Zero)

Así, la asociación Rivas Contaminación Zero, que desde hace años realiza el seguimiento de los vertidos ilegales en la zona, alerta de que la situación ya es «crítica» y urge a las administraciones de Rivas y de la capital a actuar. «No más retrasos, no más palabras sin hechos, no más promesas, no más pasarse la patata caliente de unos a otros. Pedimos una solución ya, y para ello seguimos trabajando», exigió en una nota de prensa enviada tras el seguimiento del pasado 20 de abril. La asociación ha solicitado reuniones urgentes con la Junta de Distrito de Vicálvaro, las Áreas de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid y de Rivas —en cuyo último Consejo de Medio Ambiente se trató este asunto— y al Seprona para trasladarles la gravedad de la situación.

Desde el Ayuntamiento de Rivas, el concejal de Medio Ambiente, José María Álvarez, coincide en el diagnóstico. «La zona situada tras la Casa de Asociaciones se ha desmadrado del todo y, a pesar de que se han cerrado varios pasos, las mafias continúan actuando», lamentó. Según asegura, su departamento se encuentra en contacto con el Ayuntamiento de Madrid para plantar cara al problema «desde hace muchos meses, pero existe un problema legal, que se refiere a los propietarios de los terrenos. Ellos son los responsables de actuar, pero no se les localiza». Según confirmó a Diario de Rivas Pedro Navarrete, el comisionado de la capital para la Cañada Real, no van a esperar más. «Ya está decidido que actuaremos de manera subsidiaria para limpiar la zona de manera inmediata, utilizando el Selur, es decir, recursos propios, y lo haremos lo antes posible», anunció. La presidenta de Rivas Contaminación Zero, Inés de Nicolás, celebró esta iniciativa: «Ya era hora; ojalá lo hagan pronto. Desde 2015 vamos a un vertedero por año y es crucial limpiar los terrenos, ya que se acerca el verano, con el consiguiente peligro de incendios», advirtió. A mediados de agosto de 2017 ya se produjo otro gran incendio de una zona de vertidos cercana, que obligó a desalojar a decenas de personas de viviendas de la Cañada Real que se encontraban a escasos metros de las llamas. A día de hoy, esa zona ya está rehablitada.