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Este jueves, el Pleno de Rivas Vaciamadrid fue el escenario de un bronco enfrentamiento entre el portavoz de Ciudadanos, Bernardo González, y la portavoz del PSOE y vicealcaldesa, Mónica Carazo. El motivo: una moción presentada por la formación ‘naranja’ que pretendía la reprobación de Pilar Gabina Alonso, concejala de Urbanismo y consejera delegada de la EMV, a la que Ciudadanos acusaba de haber mentido en el Pleno anterior al afirmar que la empresa municipal «»no es morosa en ninguna comunidad de vecinos de las promociones del parque público de vivienda del municipio de Rivas Vaciamadrid». A su vez, el PSOE de Rivas Vaciamadrid ha presentado una enmienda a la totalidad —a la que se sumaron IU-Equo-Más Madrid y Podemos— para reprobar a González, el portavoz de Ciudadanos, atribuyéndole haber «faltado a la verdad». Finalmente, esta última ha sido aprobada.

La cuestión se remontaba casi dos meses atrás. A principios de febrero, el Grupo Municipal Ciudadanos difundió un comunicado en el que alertaba de «importantes deudas» de la EMV de Rivas con algunas comunidades de propietarios, donde afirmaba que en un caso el montante ascendía a 35.000 euros. En aquel momento, y a consultas de este diario digital, el gobierno ripense aseguraba que se encontraba en pleno proceso de regularización de la situación, con una reunión pendiente con la administradora de la finca para ver compensaciones.

Se trataba del bloque situado en la calle de las Madres de la Plaza de Mayo, 8, entregado a finales de 2019 y en el que la EMV de Rivas Vaciamadrid posee varias viviendas en régimen de alquiler. Según ha explicado un portavoz de los vecinos a Diario de Rivas, la situación, «llámese deuda, llámese impagos, consistía en cuotas de la comunidad de propietarios pendientes de pago por parte de la EMV desde septiembre de 2019«. El vecino añade que, a su vez, la comunidad había devuelto al Ayuntamiento el recibo de la tasa de vados, «ya que nos llegó una cantidad de 18.000 euros y aquello no podía estar bien. Finalmente, se ha demostrado que la cantidad a abonar era la mitad», afirma. Por otro lado, la compra de las viviendas por parte de las personas adjudicatarias no fue lineal, sino que se prolongó desde septiembre de 2019 hasta diciembre de ese año «y, en aquel período, la EMV asumió pagos que no le correspondían, cantidades que, tras la negociación, van a ser asumidas a medias entre la empresa pública y la comunidad de propietarios», indica el vecino. El proceso de regularización de todos estos pagos pendientes por ambas partes se ha prolongado hasta este mismo mes de marzo. A día de hoy, tal y como confirman los vecinos, el asunto ha quedado solucionado.

Sin embargo, la situación política en el Pleno de Rivas estaba lejos de resolverse. La petición de reprobación, este jueves, de la concejala responsable de la EMV, Pilar Gabina Alonso, llegaba tras una interpelación al respecto presentada —también por Ciudadanos— en el Pleno de febrero, y precedida, a su vez, por varios comunicados de prensa y numerosas publicaciones en redes sociales en las que denunciaba la «deuda» de la empresa municipal. En aquella sesión plenaria, Bernardo González recordaba que esta comunidad de vecinos llevaba «más de dos años» reclamando los pagos, que ascendían «a 35.000 euros». «Ha bastado que Ciudadanos Rivas dé publicidad a este asunto para que desde la EMV se comunicase que a corto plazo todo quedaría arreglado. Lamentablemente, esta comunidad de propietarios ya ha oído esto en otras ocasiones con nulos resultados», argumentaba.

Alonso respondió entonces tajante: «Me sorprende que, a pesar de que usted y su grupo saben que lo que dicen en esta interpelación no es cierto, la mantengan. La Empresa Municipal de la Vivienda no es morosa en ninguna comunidad de vecinos de las promociones del parque público de vivienda del municipio de Rivas Vaciamadrid, como usted ha afirmado públicamente faltando a la verdad». El enfrentamiento entre la concejala socialista y el portavoz de Ciudadanos continuó con publicaciones cruzadas en las redes sociales.

 

 

Cruce de reprobaciones

Así las cosas, este jueves el Pleno del Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid debatió una moción de Ciudadanos que proponía reprobar a Pilar Gabina Alonso por «faltar a la verdad y engañar a todos los vecinos de Rivas Vaciamadrid». El texto iba más allá y proponía que el alcalde avocara las competencias delegadas en Alonso. «La prioridad de la concejala encargada de la EMV fue defender su gestión que en este caso ha sido muy deficiente, y no dudó en mentir para crear confusión», sostuvo el portavoz ‘naranja’. Y es que, aseguraba, «de la documentación de las actas de las reuniones de la comunidad de propietarios se desprende que Rivas Vaciamadrid tiene una EMV morosa». González también acusó a la EMV de la «falta de respuesta» a las consultas y «nula comunicación» con la ciudadanía.

La respuesta del PSOE de Rivas Vaciamadrid fue presentar una enmienda a la totalidad en la que proponía la reprobación de González, a la que se sumaron IU-Equo-Más Madrid y Podemos, que ha sido defendida en esta ocasión por la portavoz socialista y vicealcaldesa, Mónica Carazo. En su intervención, defendió el trabajo de la edil, «una concejala de la que nos sentimos profundamente orgullosos», y espetó al portavoz naranja que «no todo vale». «Si esto va de reprobar a quien falta a la verdad a los vecinos y vecinas de Rivas, sin duda usted debe ser reprobado en este pleno», añadió Carazo. “A pesar de las dificultades sobrevenidas con la pandemia y la borrasca Filomena, la EMV no ha dejado de atender a la ciudadanía”, añadió, para detallar que en el segundo semestre de 2020 la empresa municipal «atendió de modo presencial a un promedio diario de 8 personas, atendió un total de 11.164 correos electrónicos y envió otros 11.380, además de 548 salidas de registro. En lo que va de 2021, se ha prestado atención presencial a una media de 9 personas diarias y se han realizado 3.547 comunicaciones y se han enviado 2.718 correos electrónicos. Son los datos los que soportan una verdad o una mentira», prosiguió.

La portavoz socialista afeó a González que presentara esa reprobación aun disponiendo de «toda la información sobre el proceso de regularización» «para determinar si había débito o no» con la comunidad de propietarios e ironizó al señalar que González había hablado de cifras diferentes en distintos canales sobre esa «presunta deuda». En cuanto al «cobro de tasas de vado que no se ajustan a la normativa vigente, según González, la enmienda señalaba que «el ayuntamiento gira a la EMV el impuesto de vados de la promoción en periodo voluntario para que no se quede sin pagar, evitando así que se repercuta con intereses, y ahora está en proceso de regularización. Por lo que se puede afirmar que no es cierto que se cobren tasas de vado no ajustadas  a la normativa, como se afirma en dicha interpelación». «Si se trata de faltar a la verdad, el portavoz de Ciudadanos en Rivas mintió en el pleno municipal y a los medios cuando dijo que las enmiendas presentadas por su grupo a los presupuestos municipales habían sido rechazadas por el equipo de gobierno, cuando la realidad es que fueron presentadas fuera de plazo. La crítica se asume, pero las críticas, faltas de respeto e intencionalidades en las mociones distan mucho de ser un espacio institucional», concluyó Carazo.

Desde Podemos, Amaya Gálvez recordó que los códigos éticos son «instrumento fundamental de las instituciones», no «generar enfrentamiento y desconfianza». Y se dirigió a Ciudadanos: «Este tipo de manipulaciones suyas, que están convirtiendo en normalidad, dañan la imagen de las instituciones».

La portavoz del PP, Janette Novo, intervino para decir que «el PP no va a reprobar al portavoz de Ciudadanos. Tampoco a la concejala del PSOE, que consideramos que lleva muy poco tiempo en el cargo y no se lo merece. Pero este gobierno tiene la piel muy fina y con esta enmienda a la totalidad lo demuestran. No veo en esto un plato de gusto, y ustedes se defienden atacando con otra reprobación. Este instrumento no debe utilizarse como desahogo, sino cuando existan razones de peso que puedan conllevar una destitucióN», añadió. Respecto a Alonso, indicó que «lleva poco tiempo en el cargo y ha heredado todo aquello por lo que se la reprueba. Creo que debería haber hecho una auditoría para conocer el estado de la EMV». Novo exigió además «una investigación de las deudas de la empresa. La cuestión de esta comunidad de propietarios que ha salido a la luz debe ser investigada; no vale que unos digan que hay deuda y otros que no: habrá que saldar la deuda que haya y pedir responsabilidades. Es afeable su conducta pero creo que es más atribuible al gobierno de IU que a la propia concejala que lo ha heredado, y desde su propio partido han criticado en otro tiempo la gestión de la EMV», añadió. Respecto a la ‘contrareprobación’ presentada por los socialistas, opinó: «No me parece correcta. Él tiene unas pruebas documentales que acreditan que hay una deuda y el cuánto y el cómo se va a pagar es lo que iba a hacer. Se han atendido 1518, pero algunas quedan por atender, durante años, como la de la avenida Pilar Miró 78, que llevan años pidiendo que se les devuelva el paso de bomberos, y se presentaron preguntas y ruegos y no se ha dado respuesta. Y claro que puede haber sido un acicate lo de Ciudadanos para que se solucionara esta deuda. Esto se podría haber aclarado antes de llegar aquí. Yo he visto documentos de un lado y del otro y quiero que se aclare y se salde la deuda, y no es justo que los vecinos hagan frente a derramas por algo que no les corresponde», concluyó.

González volvió a intervenir para afirmar: «Usted es una mentirosa. Lo tenemos todo documentado», y aludió a varias actas de la comunidad de propietarios y correos electrónicos de vecinos de la promoción. «Podrían haber presentado una moción y demostraremos que son ustedes unos mentirosos, y vienen a darnos lecciones de ética, cuando ustedes retuercen el reglamento y pretenden capar el debate de lo que han hecho mal», indicó.  «El problema es lo que se dice en este pleno y se negó en diferentes ocasiones que existiera esa deuda, y como ya se ha demostrado, esta deuda existía. Han querido meter una nueva moción y no tengo ningún problema porque está documentado. Para que quede demostrado quién miente y quién no», concluyó.

Desde IU-Equo-Más Madrid, la portavoz, Aída Castillejo, intervino «intentando rebajar el tono». «Se han atendido 1.517 incidencias. Quedan 63 pendientes y se está trabajando», indicó. Además, indicó que, «según los técnicos, no es deuda lo que no se sabe si es débito o no, y en esta caso esa deuda no existía», sino que había «un proceso de regularización» en el que la comunidad de propietarios también tenía pagos pendientes. Añadió que «Rivas no merece un cargo público que mienta a sus ciudadanos, ni falte al respeto a las instituciones. Aquí no se viene a hacer teatro. En política no todo vale, ni tergiversación, ni publicaciones en redes cuando en el momento más importante, que es la aprobación de los presupuestos, Ciudadanos llega tarde», para anunciar su apoyo a la concejala Pilar Alonso.

La portavoz de Vox, María Ángeles Guardiola, aseguró: «No aprobamos esa reprobación», y pidió «que se tomen las medidas para que se resuelvan los problemas de los vecinos». Por su parte, el concejal no adscrito, Antonio Sanz, se limitó a afirmar que suscribía las palabras de Novo.

Por su parte, el alcalde de Rivas, Pedro del Cura, terció antes de la votación: «No me ha gustado el tono de algunas intervenciones y vamos a intentar hablar entre compañeros y compañeras: esto es un parlamento y no un juzgado. Yo no sé si ha habido una reprobación en la historia de este pleno; no es una buena práctica. No me gusta ninguna de las dos que hay encima de la mesa. Y si tuviera que haber alguna reprobación les invito a que la hagan al alcalde, que es el responsable de los miembros del equipo de gobierno, y en el caso de Pilar, que en muy poco tiempo, sin ninguna experiencia en gestión, ha cogido dos áreas muy complicadas y está haciendo un trabajo con muchísimo esfuerzo y dedicación, con ayuda de los técnicos».

A continuación se votó la enmienda a la totalidad del PSOE, en la que se pedía la reprobación de Bernardo González, portavoz de Ciudadanos. Fue aprobada por 15 votos a favor —IU-Equo-Más Madrid, PSOE y Podemos, con la ausencia justificada de Yasmin Manji, de IU-Equo-Más Madrid—, 8 votos en contra —Ciudadanos, PP, el concejal no adscrito— y la abstención de Vox.

Tras el Pleno, el portavoz de Ciudadanos, Bernardo González, acompañado por el representante de su partido en el consejo de administración de la EMV de Rivas, Luis Mas, convocó una rueda de prensa en la que calificó la «negación de la deuda» por parte de los socialistas como «juego de palabras». «La hay desde el momento en que debes cantidades que no has pagado, lo dice la propia definición», apuntó González, que continúa insistiendo en que la consejera delegada de la EMV «mintió», ya que en febrero esa deuda, asegura, «sí existía». Respecto a las distintas cantidades de deuda aportadas, González se remite a la documentación en la que ha basado sus iniciativas —actas y correos electrónicos— y los vecinos indican que «la cantidad no se ha mantenido estable, ya que las cuotas se acumulaban mes a mes y además, según el momento del proceso de regularización, se iban aclarando otras cantidades» atribuibles a una u otra parte.

El PSOE de Rivas, por su parte, envió una nota de prensa en la que reiteraba los puntos expuestos en el Pleno por Carazo, además del apoyo del partido a la concejala delegada de Urbanismo y consejera delegada de la EMV, Pilar Gabina Alonso. Diario de Rivas ha solicitado por diferentes vías hablar con la aludida, pero desde el PSOE y desde el Gobierno municipal se remiten al comunicado y a lo ya expuesto en el Pleno.

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