En el Mirador Sur de Rivas Vaciamadrid no habrá viviendas. Esta zona del municipio, situada detrás del auditorio Miguel Ríos y uno de los pocos sectores por desarrollar que quedan junto al núcleo urbano, será definitivamente una zona verde. Así consta en el plan de acción de la nueva Agenda Urbana 2030 de Rivas.
En el cuarto proyecto del plan de acción de la Agenda Urbana 2030 de Rivas, “Conexión con el medio natural”, el consistorio ripense incluye la transformación de este sector en un espacio natural de uso dotacional. En la actualidad, ese espacio consta como terreno urbanizable (aún no ejecutado) en el Plan General de Reordenación Urbana (PGOU) del año 2004.
La intención inicial, antes de la paralización de las licencias urbanísticas, el proceso ‘Rivas, párate a pensar’ y el documento de información urbanística, diagnóstico y síntesis previo a la revisión del Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad elaborado por el despacho Ezquiaga Arquitectura, Sociedad y Territorio S.L., era construir 2.625 viviendas en el Mirador Sur. De ellas, la mayoría habrían sido protegidas, dejando solo 400 viviendas libres destinadas a generar plusvalías que cubriesen los gastos de recuperación del suelo de los antiguos vertederos.
Además, se reservaba suelo para una dotación universitaria, una operación ya descartada que iba a ser promovida por el Consorcio Urbanístico de Rivas, cuyo accionariado está compuesto al 55% por la Comunidad de Madrid y 45% por el Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid.
La alcaldesa de Rivas Vaciamadrid, Aída Castillejo, ya avanzó la decisión de no urbanizar este ámbito. Ahora, en el citado cuarto proyecto incluido en el plan de acción de la Agenda Urbana 2030 de Rivas, el Ayuntamiento confirma que va a “transformar el sector Mirador Sur en un espacio verde dotacional”. Esto es, se convertirá el Mirador Sur en un sector de suelo no urbanizable, en línea con lo que proponían los arquitectos en el citado documento previo al desarrollo del nuevo PGOU.
En concreto, estos abogaban por abandonar la pretensión de construir en este sector de la ciudad debido a que un 70% del suelo se encuentra en un ámbito con pendientes de entre el 10 y el 20 por ciento de inclinación. La propuesta alternativa era la creación de una zona verde de transición hacia el Parque Regional del Sureste.
La alcaldesa comunista hará lo imposible para que no se construyan viviendas, ni aún siendo protegidas como en este caso, y renunciando a infraestructuras tan necesarias como la universitatia planteada. Todo para no perder su poltrona. Eso no es gobernar pensando en los vecinos sino en sus intereses partidistas para no perder su buque insignia donde hacen lo que les viene en gana y tienen un séquito de fanáticos palmeros que les hacen los coros con plataformas y asociaciones que defienden sus intereses.
Es que en Rivas ya no deberían realizarse más “mega proyectos” de construcción. Era una ciudad joven, que pretendía seguir un modelo sostenible, con un techo poblacional contenido… Y ya tenemos nuevos proyectos de ladrillo que harán disparar la población de Rivas, pasando de ser una ciudad cómoda y sostenible a una ciudad más del cinturón de Madrid. Mucha “Conexión con el medio natural”, pero los gestores sólo piensan en ladrillo.
¿Me gustaría saber que no acabo de entender en la imagen cual es la idea sobre el mirador norte?
He estado mirando en el PGOU pero no queda claro si la idea es seguir urbanizando por encima de los chalets de la calle Pilar Bardem antes de empezar la zona de pinar.