Ismael Muñoz, ripense de 16 años, campeón autonómico de boccia

Ismael Muñoz, junto a sus padres, tras ganar la liga regional de boccia (foto: Ismael Muñoz).

Ismael Muñoz Barba, joven ripense de 16 años, se ha proclamado campeón de la liga de Madrid de boccia, una modalidad deportiva exclusivamente paralímpica que tiene similitudes con juegos estratégicos como la petanca. Ismael, deportista con parálisis cerebral, ha ganado los 10 partidos que ha disputado en las cinco jornadas de las que se compone el torneo, dos de ellas celebradas en el colegio público El Olivar de Rivas.

El adolescente ripense ha tenido una trayectoria inmaculada en la liga regional, torneo organizado por la Federación Madrileña de Deportes de Parálisis Cerebral y Daño Cerebral Adquirido (FMDPC).

Esta se compone de 5 jornadas en total y en cada una de ellas los deportistas tienen dos partidos. Ismael participa en la modalidad individual, pero también se compite por parejas y por equipos. “Ha conseguido un pleno de victorias porque ha ganado los 10 partidos que ha jugado en la liga”, afirma orgulloso Feli sobre su hijo, que conquistó así el título autonómico el pasado sábado 2 de abril en Parla. En dicho municipio se celebró la última jornada. Previamente se habían disputado dos en Rivas, en el CEIP El Olivar.

El próximo objetivo de Ismael, que “se lo toma con mucha ilusión”, según su progenitor, es el campeonato de España infantil (para deportistas menores de edad) que tendrá lugar en Bilbao los días 22-23 y 24 de abril. En mayo se celebrará además la Copa de España de boccia en Sevilla, competición cuya clasificación depende del ranking nacional.

Ismael espera poder estar allí, pero su gran ilusión del deportista ripense es ser convocado en el futuro por la selección nacional de su deporte. “Ha visto a muchos compañeros conseguirlo y viajar a distintos países para competir y esto le hace especial ilusión”, concluye Feli.

Ismael Muñoz, a la izquierda en la foto, junto al resto de deportistas en la última jornada de la liga autonómica de boccia

Estudia en Rivas y entrena en San Sebastián de los Reyes

Ismael estudia 4ºESO en el IES Europa (cumplió los 16 años en marzo), único instituto de Rivas que cuenta con personal sanitario profesional que asiste al alumnado que lo necesita, como es el caso de este adolescente ripense.

Además, acude todos los sábados a entrenar durante dos horas a San Sebastián de los Reyes. Allí tiene un acuerdo para disfrutar las instalaciones de un polideportivo municipal la fundación Ana Valdivia, que está especializada en deportistas con parálisis cerebral. No solo en boccia, sino que en su club deportivo se practican también slalom y fútbol en silla eléctrica.

Cuenta Feli, el padre de Ismael, que su hijo lleva practicando boccia 4 o 5 años, si bien ha tenido que hacerlo de manera intermitente. “La pandemia no ayudó pero sobre todo ha sido por distintas operaciones a las que Ismael se ha tenido que someter”, explica. La última de las intervenciones tuvo lugar el año pasado. “Tuvo una recuperación muy larga porque fue debido a la escoliosis, pero afortunadamente todo salió bien y pudo volver a entrenar”, añade.

Ismael compite en la categoría BC1, en la que participan los deportistas que están capacitados para lanzar con la mano. Existen otras categorías en función de las limitaciones de los participantes, que en ocasiones lanzan con la boca o bien con la ayuda de una especie de gorro que tiene una pequeña antena. En esta modalidad los deportistas se ponen en contacto con sus técnicos a través de lenguaje gestual para que coloquen la canaleta tal y como ellos desean antes de proceder al lanzamiento.

Ismael Muñoz, tras conquistar el campeonato autonómico de boccia (foto: Ismael Muñoz).

Dinámica de la boccia

La boccia es un deporte que combina habilidad técnica y táctica. Se practica sobre una pista rectangular y el objetivo es lanzar una bola lo más cerca posible de la pelota blanca que sirve de objetivo. Al mismo tiempo deben intentar alejar la de los oponentes, de ahí el parecido que tiene con la dinámica de la petanca.

Cada jugador lanza desde su propio box, y no puede salirse ni pisar las líneas que limitan dicho espacio. En total, tal y como explica el Comité Paralímpico Español (CPE), cada jugador, pareja o equipo dispone de seis bolas en cada una de las cuatro mangas (seis en las competiciones por equipos) y gana aquel cuya bola termine más cerca de la blanca.

“Además, recibirá un punto extra por cada bola adicional que haya conseguido acercar a la blanca por delante de la primera del contrario”, explica el CPE.

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