El enlace de Rivas con la M-50 entra de nuevo en vía muerta

M-50 a su paso por Rivas (©Planeta Rivas)

La posibilidad de que Rivas Vaciamadrid cuente a corto plazo con un acceso directo a la M-50, cuyo trazado discurre a escasos metros del municipio, vuelve a desvanecerse. En las últimas semanas, y a pesar de los esfuerzos del Gobierno municipal y de todos los grupos políticos que componen el Pleno ripense, se han sucedido los jarros de agua fría a un proyecto que lleva más de una década sin concretarse.

En los últimos meses, tanto el Consistorio como la totalidad de los grupos políticos representados en el Pleno de Rivas se movilizaron en numerosos frentes para conseguir que el Ministerio de Fomento comenzara a construir la M-50 este mismo año. Cada uno de ellos se dirigió a su grupo de referencia en el Congreso de los Diputados con el objetivo de lograr que se incluyera en los Presupuestos Generales del Estado, ahora en plena fase de tramitación parlamentaria, incluyeran una partida cercana a los 8 millones de euros para construir el enlace que demandan los vecinos de Rivas desde hace más de una década.

La última ofensiva parlamentaria se remonta a varios meses atrás, con una iniciativa socialista, el pasado mes de diciembre, a la que Fomento contestó que entendía que debía ser el Ayuntamiento de Rivas quien promoviera la obra; y una Proposición No de Ley de Unidos Podemos, en la que se instaba al Gobierno central a asumir el proyecto.

Ahora, con ocasión de la votación de los presupuestos, el alcalde de Rivas, Pedro del Cura, ha mantenido una ronda de contactos con los grupos políticos del Congreso para recabar apoyos, incluidos el Grupo Popular y Ciudadanos (cuyos representantes ripenses sí apoyan la construcción de la infraestructura), para recabar apoyos. Sin embargo, estos no han sido suficientes. Este miércoles se debatieron en la Cámara Baja numerosas enmiendas a las cuentas estatales para este año, entre las que se encontraba la solicitud de una partida para la construcción del acceso a la M-50 desde Rivas. La iniciativa socialista estaba acompañada, además, de la petición de mejora de la iluminación de la A-3 a su paso por Rivas. Sin embargo, su recorrido parlamentario terminó en la tarde de este miércoles, cuando fue tumbada por PP y Ciudadanos, junto a varios cientos de enmiendas más, con el argumento que «no son constructivas» por superar la cuantía prevista en las cuentas estatales.

Pero este no ha sido el único frenazo a la conexión. Otras dos cartas remitidas al Ayuntamiento de Rivas en las últimas semanas, a las que ha tenido acceso Planeta Rivas, cierran sendas vías de diálogo para conseguir el objetivo de la M-50. La primera de ellas, remitida por la Consejería de Transportes, trasladaba al Gobierno municipal la negativa del consejero de Transportes, Pedro Rollán, a reunirse con el alcalde de la ciudad, que le había solicitado un encuentro para pedirle apoyo con la reivindicación de esta infraestructura. El argumento esgrimido es que la competencia en la materia corresponde al Ministerio de Fomento. Y, por su parte, la Dirección General de Carreteras de Fomento, departamento al que el Consistorio se había dirigido también por carta para solicitar el enlace, se ratifica en otra misiva en la tesis de que es el Ayuntamiento de Rivas quien debe proyectar, construir y financiar la conexión con la M-50, correspondiendo al Ministerio de Fomento la autorización, en su caso, de la obra.

Un ‘plan B’

El Ayuntamiento de Rivas insiste en la necesidad de esta infraestructura para aliviar la congestión tanto en el interior del municipio como en la A-3. Se calcula que la disminución del tráfico de la A-3 podría alcanzar el 20% una vez que la ciudad se conectara con la M-50, que, además, está llamada a convertirse en el nuevo límite entre los municipios de Rivas y Madrid. El Ayuntamiento ripense asegura que, en otras 17 ocasiones, los enlaces sí fueron sufragados por el Gobierno central, por lo que tachan la actitud del Gobierno central de «discriminatoria». Además, argumenta que existe una sentencia del Tribunal Constitucional, fechada en 2012, relativa a obras de cierre de la M-50, que señala que esta es una competencia estatal.

«Confiábamos en que este trabajo parlamentario diera sus frutos, pero no ha sido así», argumenta Curro Corrales, edil ripense de Presidencia. «Estamos reivindicando la parte más barata de las obras de enlace, la de la primera fase, que asciende a 8 millones de euros. No tiene sentido que nos digan que tenemos que asumir nosotros el coste«, añade. Ahora, después de que los últimos esfuerzos hayan encallado, el Gobierno municipal compartirá con el resto de los grupos municipales la situación y buscará nuevas vías para conseguir el enlace. Entre las opciones que se barajan, además de nuevos esfuerzos parlamentarios, se encuentra la búsqueda de la implicación de otras administraciones afectadas, como el Ayuntamiento de Madrid (que tiene pendiente desarrollar la parte de la ciudad que limita con Rivas), los promotores de los desarrollos urbanísticos pendientes, la Comunidad de Madrid y el Estado. «Se trata de un problema que trasciende a nuestro municipio, por lo que deberíamos sentarnos todos a buscar soluciones. Además, apelaremos a la movilización ciudadana para conseguirlo. No es una batalla perdida», concluye Corrales.

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