Rivamadrid se ha propuesto acabar con las imágenes de contenedores rodeados de basura y enseres fruto de conductas incívicas. Aunque se están dando muchas facilidades para evitar el vertido irresponsable de residuos en la vía pública, todavía en algunos lugares de la localidad siguen apareciendo restos de poda, electrodomésticos o muebles viejos en plena vía pública: son los llamados ‘puntos negros’ de la limpieza, que suponen a las arcas municipales un sobrecoste de aproximadamente 100.000 euros anuales, según fuentes municipales.
Las personas están cada vez más concienciadas con la necesidad de respetar los horarios y lugares de recogida de basura y otros residuos, pero todavía «hay ciertas zonas que se pueden considerar ‘puntos negros’ de limpieza, porque en ellas aparecen con frecuencia restos de poda o maderas e incluso colchones», explican desde Rivamadrid. El más llamativo está situado en la calle Jazmín, al lado del arboretum y del Zoco Rivas. «Este punto se ha convertido de repente en un ‘vertedero urbano’ porque algunos hacen descargas y dejan escombros, restos de poda o maderas. En ocasiones lo limpiamos y, cuando todavía no ha regresado la retroexcavadora a la sede, ya han hecho un nuevo vertido», apuntan desde la empresa pública. En algunas ocasiones la policía ha podido ver ‘in fraganti’ a los camiones o coches implicados en esas acciones y se les ha sancionado, pero el problema persiste en este y otros enclaves de la ciudad.
Fotogalería: estos son los ‘puntos negros’ de la limpieza en Rivas
La Empresa Municipal de Servicios Rivamadrid trabaja desde hace tiempo para que la recogida de residuos sea lo más eficiente posible. Sin embargo, recuerdan que para la consecución de este objetivo es importante la implicación de los vecinos, ya que depositar correctamente las basuras, los restos de poda o los enseres que no se utilizan beneficia a toda la ciudad. «Durante un tiempo hubo unos contenedores para que la ciudadanía depositara ahí los restos de poda, pero al final echaban todo tipo de cosas», relatan desde la empresa pública. «Nos encontrábamos bicicletas, muebles…, mezclados con la poda, así que se decidió poner en marcha el servicio de recogida de poda a domicilio«, que puede solicitarse a través de la web de Rivamadrid [aquí, el enlace para pedirlo]. En el caso de los enseres hay una recogida semanal en todos los recintos de contenedores de la ciudad; también pueden llevarse, sin coste alguno, al punto limpio.
Con todo, «hay gente que sigue depositando en la vía pública los residuos y la poda, generando un problema de limpieza que puede suponer insalubridad y que además da una mala imagen de la ciudad». En el aparcamiento del Polideportivo Parque del Sureste, en la plaza de los Madroños, en la calle de Holanda, España y en la calle de Sevilla también se encuentran en ocasiones vertidos incontrolados. La limpieza de estos ‘puntos negros’ supone un desembolso de dinero público extra de cerca de 100.000 euros al año.
Multas para las personas incívicas
La ordenanza municipal recoge sanciones para aquellos que no depositen correctamente las basuras, cuyo importe oscila entre los 751 euros y los 6.000 euros. Concretamente las infracciones leves tienen una multa de hasta 750 euros, las graves hasta 3.000 euros y las muy graves pueden llegar a los 6.000 euros. Para prevenir posibles infracciones, el Ayuntamiento de Rivas instalará, en las próximas semanas, una nueva señalética en los ‘puntos negros’ que avisará de las sanciones previstas por este tipo de conductas y guiará a la ciudadanía para que realice un correcto uso de los contenedores.
Y es que para prevenir estas situaciones la colaboración ciudadana es clave. En este sentido, desde Rivamadrid se recomienda que, en caso de observar un posible vertido ilegal en algún punto de la ciudad, se avise de manera inmediata a la Policía Local para que intervenga.
Noticias relacionadas:
Así funciona el nuevo sistema de recogida puerta a puerta de restos de poda en Rivas
Rivamadrid reorganiza la recogida de muebles y enseres: un día a la semana en cada barrio
Siete cosas que puedes conocer (y hacer) en la web de Rivamadrid
Galería: Rivas en imágenes
El Ayuntamiento de Rivas organizará una nueva charla sobre menopausia con perspectiva de género: “Se ha tomado nota”
El consistorio ripense asegura que tendrá en cuenta la perspectiva de género, tal y como demandan la asamblea 8M Rivas y de la Casa Feminista en una nota pública.
Rivas con la Sanidad Pública invita a plantar un jardín con flores de papel en la parcela del cuarto centro de salud
Por segundo año consecutivo, la plataforma Rivas con la Sanidad Pública propone construir un ‘jardín por la Sanidad Pública’
El Ayuntamiento de Rivas renueva sus tres Pajaritas Azules por su labor con el reciclaje de papel y cartón
Por segundo año consecutivo, ASPAPEL ha distinguido al Ayuntamiento de Rivas con la máxima distinción de estos galardones
Osas de Rivas, el proyecto deportivo pionero que nutre a la selección española campeona de Europa
Nueve jugadoras de Osas, y sus dos entrenadores principales, han formado parte del plantel que se ha proclamado campeón continental por primera vez en la historia.
El Ayuntamiento de Rivas pide el cierre definitivo de la incineradora de Valdemingómez
El pleno municipal ha aprobado una moción presentada por el grupo municipal IU-Más Madrid-Verdes Equo con el apoyo del PSOE
Interesante. Cuando podríamos ver el cambio d contenedores en calle jovellanos.,frente al número 1.
Están obsoletos y con dificultades para abrir el contenedor de materia orgánica. Y los amarillos están con los ojos de buey demasiado pequeño. Y para personas con dificultades complicadas las situaciones de poder usarlas correctamente . Por tanto seguimos adelante siempre con el servicio extraordinario
Y hablando de todo un poco, qué hacemos con esos vecinos tan majetes que dejan las cacas de sus perros en las calles y jardines?
Qué más se puede hacer contra estos personajes que les importa bastante poco las zonas comunes de todos los ciudadanos?
Por mucho dinero que se invierta en papeleras caninas y zonas caninas, la educación de las generaciones futuras depende de nuestra educación. Y, desde luego, dista mucho de ser un buen ejemplo.