Servicio de nutrición y cocina propia: así cuida Geriasa la alimentación y la salud de sus residentes

Consulta del dietista nutricionista de Geriasa en el centro de Rivas (foto: Diario de Rivas).

Uno de los pilares fundamentales de la salud es la alimentación, aspecto que en la población mayor es si cabe más importante debido a la cantidad de circunstancias personales que la condicionan en dicho tramo de edad. Geriasa, referencia en el cuidado de mayores gracias a sus más de tres décadas de experiencia, es plenamente consciente del impacto que la dieta tiene en sus residentes, de ahí que sea una de las cuestiones en las que más empeño, compromiso, conocimiento y esfuerzo ponen todos sus profesionales para garantizar la calidad de un servicio que se asienta sobre dos factores diferenciales: la apuesta por la cocina propia y la función del dietista nutricionista.

Diego Rodríguez, dietista nutricionista de los tres centros Geriasa —Brunete, Madrid capital y Rivas—, explica que «la nutrición es una parte holística de la salud del paciente y de su tratamiento porque influye en su estado de salud, funcional e inflamatorio, entre otros, y puede prevenir caídas e infecciones o ayudar a recuperarse de fracturas de cadera, úlceras por presión y otras patologías habituales en las personas mayores”. La figura del dietista nutricionista en los centros Geriasa es una de las piezas claves de un engranaje en el que participa de forma decisiva todo el capital humano de una compañía que está plenamente comprometida con la calidad de la comida que ofrece en sus centros.

Desde los cocineros y cocineras hasta el consejo de administración, que supervisa todo lo referente a la nutrición en sus centros, pasando por todos y cada uno de los distintos equipos que velan por la salud de los residentes en el día a día. “La nutrición se trabaja de una forma muy multidisciplinar en Geriasa», destaca Rodríguez. «Los pacientes son derivados por el equipo médico y de enfermería, pero también por el equipo de terapia ocupacional si detecta problemas de deglución por una cuestión neuronal o relacionada con la dentición, y también por el equipo de fisioterapia, porque registran los pesos de los pacientes y además pueden detectar si la capacidad funcional de alguno de ellos va disminuyendo”, expone el dietista nutricionista.

Diego Rodríguez pasa consulta a una residente de Geriasa Rivas (foto: Diario de Rivas).

Diego Rodríguez, que forma parte de la división de nutrición especializada en desnutrición relacionada con la enfermedad de Nutricia y trabaja de forma integrada con el equipo profesional de los centros Geriasa, tiene una doble misión: velar porque los menús cubran las necesidades de todos los residentes tanto desde el punto de vista sanitario —adaptados a diferentes patologías que condicionan a la alimentación— como nutricional y hacer un seguimiento individualizado, completamente personalizado, de aquellos mayores que presentan problemas en su dieta por el motivo que sea.

Esta labor parte de la coordinación y comunicación directa del dietista nutricionista con los distintos equipos de los tres centros Geriasa y se ejecuta, entre otras medidas, con la exploración y valoración in situ de Diego Rodríguez a los residentes, a los cuales pasa consulta en sus visitas recurrentes a las tres residencias.

“Dado que el paciente anciano tiene mucha susceptibilidad de estar desnutrido, el objetivo es actuar de la forma más rápida posible para evitar su deterioro funcional”, indica el dietista nutricionista, lo cual es mucho más fácil de conseguir, añade, “al formar parte del equipo de los tres centros Geriasa”.

Alimentación de calidad, saludable y rica

Además de la labor nutricional individualizada que Diego Rodríguez lleva a cabo con todos los residentes de Geriasa que requieran dicha atención, otra labor esencial del dietista nutricionista es garantizar que los distintos menús adaptados cubren las necesidades nutricionales de los residentes. “El hecho de que Geriasa apueste por la cocina propia en todos sus centros facilita muchísimo este objetivo, porque permite hacer pequeñas modificaciones, sugerir nuevos platos para alcanzar un mayor equilibrio nutricional y también estar en comunicación directa con el equipo de cocina”, dice el experto en nutrición.

El dietista nutricionista de Geriasa repasa los menús junto a una cocinera del centro de Rivas (foto: Diario de Rivas).

Los cocineros y cocineras de Geriasa dan continuidad al trabajo de Diego con una sobresaliente labor que garantiza la calidad de la alimentación de los residentes, algo a lo que también ayuda de forma notable la coordinación entre los tres centros Geriasa, la determinación de la compañía por la alimentación saludable (se aprecia en avances concretos como, por ejemplo, que se apueste exclusivamente por la bollería casera), y la voz de los propios residentes.

Esta última no solo es tenida en cuenta en las tres residencias, sino que además tiene una influencia decisiva en la evolución de los distintos menús gracias al éxito de una medida de reciente implantación en los tres centros Geriasa: la creación de un equipo de residentes con buena salud neurológica que se encarga de puntuar y valorar todos los platos que comen cada día.

El CEO de Geriasa, Joaquín Sastre, valora muy positivamente la experiencia en los dos meses que lleva implantada esta nueva herramienta de comunicación con los residentes en la que todos los participantes se muestran muy involucrados. “Nos permite recibir información directa de calidad de forma muy rápida”, destaca Sastre sobre esta medida. “A final de mes obtenemos las medias de cada plato y el promedio de los centros de forma que podemos comparar no solo si son buenas o malas, sino también si hay desequilibrios en la valoración entre centros de una misma receta”, continúa.

En base a estos resultados, concluye Joaquín Sastre, “los platos que reciben mayor puntuación se potencian, se ponen más veces incluso porque gustan, y los de menor puntuación se retiran salvo que sean esenciales por cuestiones nutricionales, y en caso de que existan diferencias grandes de puntuación, el equipo de cocina que haya obtenido mayor puntuación comparte su conocimiento con aquel centro en el que la puntuación para esa receta haya sido baja y así se mejora la calidad del servicio de forma inmediata”.

Residentes de Geriasa puntúan la calidad de los platos (foto: Geriasa).cuenta

Geriasa Rivas, ubicado en la calle Mariano Barbacid número 1, abrió sus puertas el pasado mes de marzo y es el tercer centro para mayores de una familia dedicada al cuidado de este grupo de población desde hace más de treinta años.

Otras noticias:

Programas de Recuperación Especializada de Geriasa Rivas: una ayuda extra para superar dolencias

Así es Geriasa Rivas, la nueva residencia para mayores de la ciudad