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OPINIÓN

Bernardo González

Bernardo González

Portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid

Desde Ciudadanos, basamos nuestra política en la propuesta. Nosotros somos personas normales, con trabajos fuera de la política, que en un momento decidieron dar un paso adelante para mejorar España, Madrid y, por supuesto, Rivas.

Nosotros apoyamos las iniciativas que se traen al pleno sin mirar el color del proponente de la misma; entendemos que tenemos la obligación de dejar un Rivas mejor al final de la legislatura, porque no vinimos a la política a buscar un sillón.

Entendemos este trabajo como un servicio a la sociedad, por eso sabemos quién es nuestro jefe: el vecino. De este modo, nuestra prioridad es escuchar y a partir de ahí, trabajamos. Nos gusta saber los problemas de los vecinos y no realizar y desarrollar una agenda política. De hecho, lo hemos demostrado en múltiples ocasiones logrando resolver problemas del Ayuntamiento que los vecinos consideraban indisolubles.

Una vez más ha vuelto a ocurrir. Hace pocos días se celebraba la Ruta De La Tapa, una iniciativa que ya existía antes de la pandemia y que era un éxito. Nuestros concejales acudieron a probar las distintas tapas con la intención de escuchar a vecinos y hosteleros y, por supuesto, apoyar al sector que tanto ha sufrido en los últimos meses.

Pedimos la tapa, por cierto, con muy buena pinta, y el hostelero nos cuenta que se incorporó a la iniciativa pocos días antes, nos dice que el Ayuntamiento le insistió porque no tenían participantes suficientes. Las cifras no mienten, los bares se han reducido a la mitad.

Allí mismo comprobamos que Casa Luis, uno de los locales fijos en la Ruta De La Tapa, ha colgado este texto en sus redes sociales anunciando que no participa en el evento: “Nos hace especial ilusión todos los años poderos ofrecer una buena tapa de calidad y elaborada, por eso preferimos este año no participar a improvisar algo que no esté a la altura de nuestros clientes”. Después añaden: “Pedimos disculpas a todo el que le hubiese encantado venir a Casa Luis a probar nuestra tapa y prometemos que en la próxima edición (siempre que se informe correctamente) lo daremos todo para que podáis degustar una tapa 100%”.

Vamos hasta otro de los locales. En este nos cuentan los vecinos algo que nosotros hemos detectado también: no existe un recopilatorio con las tapas, los vecinos no saben qué tapa se van a encontrar en cada local. El folleto tampoco incluye un pequeño mapa, resultando un folleto muy general que no sirve de gran ayuda. Hay otro detalle que nos llama la atención: hay bares que solo sirven la tapa en una franja horaria, algo lógico, pero los organizadores del evento han olvidado comunicarlo.

La preocupación nos invade rumbo al siguiente local cuando nos percatamos de otra de las deficiencias que nos han contado: un material gráfico elaborado con detalle y esmero serviría, no solo para que los ripenses eligieran las que más le agradasen, sino también para conocer los ingredientes y evitar alergias alimentarias, algo que cada día es más común.

En el siguiente local, el dueño nos cuenta que han notado falta de información desde el Ayuntamiento, han recibido el material con muy pocas horas de antelación, sin unas pegatinas que destacaran la participación de local en la iniciativa, tampoco se ha marcado un precio unitario y se exige al hostelero un dispositivo con conexión. Su sensación es que se ha decidido hacer por “cubrir el expediente”, pero no buscando el bien del hostelero y del vecino.

No es la primera vez que la concejalía responsable queda en tela de juicio. Durante los últimos meses hemos visto como la apertura del mercadillo frente al Pilar Bardem se retrasaba y enquistaba de forma absolutamente injustificable. Hemos visto como los comerciantes se enfrentaban a la concejala encargada de este asunto y el problema era finalmente resuelto por el alcalde. También ha recibido críticas entre los autónomos por crear unas ayudas que dejaban fuera a los que no tenían local.

Nosotros pensamos que iniciativas como esta son útiles y se deben hacer para ayudar a la reactivación del tejido productivo de Rivas, pero entendemos que, como se hace con el dinero de todos, hay que ser especialmente cuidadoso con los detalles. Creemos que es posible hacerlo con cuidado, esmero y capacidad de servicio.

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