Hace ya cuatro años que los sindicatos denunciaron a Diario de Rivas, tras las quejas reiteradas de los usuarios de Correos en Rivas, que la falta de personal hacía que el servicio se resintiera, escenario que se mantiene, aseguran, «exactamente igual» en la actualidad. Las colas en las dos oficinas de Correos en Rivas (avenida de Pablo Iglesias y calle Electrodo) se suceden, las críticas al servicio de reparto y al de atención en oficina son numerosas y los representantes sindicales apuntan en la misma dirección que entonces: no hay personal suficiente en el municipio para que el servicio sea el adecuado. Correos, por su parte, mantiene que tanto el servicio de reparto como el de atención en las oficinas se están desarrollando “con normalidad”.
«Traete una silla nevera y bocadillos si quieres venir a esta oficina», escribe Raúl. «No responden al teléfono, en verano solo trabajan por la mañana y el sábado cierran, con lo cual me es imposible recoger un paquete que son productos de alimentación…. Un desastre», dice David. «Mucha gente esperando y poca gente atendiendo«, apunta Pablo. Son solo tres de los comentarios negativos recientes, a modo de ejemplo, que se pueden leer en un directorio web de oficinas de Correos en relación a la de la calle Electrodo de Rivas Vaciamadrid. Muy parecido es el panorama en la de la avenida Pablo Iglesias: «Un desastre … Saturado a todas horas”, denuncia Luis en la línea de la opinión de Iván, que asegura que «Para ser atendido has de armarte de paciencia; la cola de espera es enorme, independientemente de la hora a la que se acuda».
Basta con darse una vuelta por las inmediaciones de ambas oficinas de Correos para comprobar en primera persona que las colas se suceden a diario.
El diagnóstico de los sindicatos
Diario de Rivas ha consultado a los principales actores sindicales acerca de la situación del servicio de Correos en Rivas Vaciamadrid y todos coinciden en un diagnóstico similar: apuntan a un proceso de reconversión de Correos hacia un modelo híbrido donde «la rentabilidad es más importante que la vocación de servicio público», lo cual se muestra en detalles como la «falta de personal a nivel nacional», no solo en Rivas.
“Simplificando un poco, Correos lleva un proceso de privatización desde hace por lo menos 15 años”, dice Javier Lobo, delegado sindical de CGT (Confederación General del Trabajo) de Correos Madrid, que argumenta que pese a que “la economía no lo ha permitido, no se ha paralizado el proceso porque se están instaurando procedimientos de empresa privada, entre ellos perder plantilla”, explica. Lobo cifra en 15.000 los puestos de trabajo que se han perdido en Correos en los últimos 10 años. “Es un ERE encubierto”, denuncia.
En la misma línea se expresa Sergio Mira, Secretario de Correos de Comisiones Obreras en la Comunidad de Madrid: “Hay menos personal contratado, las condiciones están cambiando, tanto en lo que respecta a los horarios y como a la forma de trabajar”, dice Mira, que pone como ejemplo que la política actual de Correos es la de no repartir todos los días, “una tendencia europea”, señala. “No se apuesta por el servicio público de Correos; por ejemplo, se está derivando mucha actividad de Correos a Correos Express, que es más rentable porque entre otras cosas hay muchos trabajadores autónomos, y eso hace que se dé un peor servicio público”, concluye Mira.
Francisco Barrios, secretario del sector postal de UGT Madrid, comparte la opinión de Javier Lobo y Sergio Mira sobre el servicio de Correos en general: “Por mucho que queramos hacer malabares, no podemos”, se lamenta. “Con la falta de personal que existe actualmente el servicio se deteriora; el reparto lo hacen personas y si faltan estas el servicio no puede funcionar”, afirma el representante de UGT de Correos, que incide en la necesidad de aumentar la contratación para que que se pueda garantizar el servicio de reparto los cinco días de la semana.
Correos en Rivas Vaciamadrid
Los tres representantes sindicales consultados por este digital sobre la situación de Correos en Rivas profundizan una vez planteado el diagnóstico general de la situación en lo que ocurre en el municipio.
Javier Lobo, delegado sindical de CGT Correos de la Comunidad de Madrid, reconoce que “hay pueblos como Rivas en los cuales el cartero no pasa hasta el quinto día por no estar cubierta la plantilla necesaria”. Expone así el delegado sindical de CGT una de las consecuencias, en su opinión, en las que se plasma el deterioro del servicio de Correos en ciudades como Rivas: “Todos los ratios de productividad van quitando la obligatoriedad de dar el servicio a diario”. Además, Lobo cuenta que “en oficinas pasa lo mismo, y se ve mejor en ellas que Correos ya no es un servicio público, sino que es privado, porque encima les exigen una productividad mínima a los trabajadores de oficina, que deben vender de todo”.
En opinión de Sergio Mira, secretario de Correos en Madrid de CCOO, “la tipología de Rivas afecta y agrava la situación de Correos en el municipio pero el problema grave es común: el empleo es más precario”, afirmación que secunda Francisco Barrios, secretario del sector postal de UGT Madrid, con datos laborales concretos actualizados de Correos en Rivas. “En Rivas hay 34 secciones de reparto, de las cuales se han cubierto 30 hasta finales de septiembre. En total, 16 contratos terminaban el último día de septiembre en Correos de Rivas y la previsión del mes de octubre de contratación en reparto para Rivas es de cuatro”, apunta Francisco Barrios, si bien puntualiza que se trata de una previsión que la empresa puede modificar a lo largo del mes en curso.
Barrios tiene muy claro que “esta previsión repercutirá negativamente en la calidad del servicio de reparto en Rivas”, por lo que es pesimista sobre el futuro a corto plazo sobre la evolución del servicio general, en oficina y en reparto, de Correos en Rivas.
Correos, por su parte, defiende que “en las oficinas de Correos de Rivas más del 90% de los clientes son atendidos en menos de 10 minutos y que no se ha registrado un incremento significativo en las quejas de los clientes”, y recalca que el servicio de paquetería, al igual que el de atención al cliente en oficina, se está llevando a cabo con normalidad.
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Mi experiencia es la contraria: un buen servicio y eficaz. No hagamos siempre caso al apocalipsis zombis sindical, que van a lo suyo.
Malabares no sé, pero dejar de antender gente cuando aún hay mas de 5 personas esperando si que lo hacen. Que se acerca la hora de comer y les da igual tener a la gente esperando.
Es un poco extraño lo que dicen aquí cuando la propia oficina de correos admite no tener personal de reparto (paquetería) en rivas. Por supuesto, tendrán reparto en algunas calles vip.
El buzoneo sí que lo reparten, la furgoneta deja a una persona con el carrito y se va haciendo la calle.