El proyecto energético comunitario ‘La Pablo Renovable’ en el que participan numerosos vecinos y vecinas de las diez mancomunidades de Pablo Iglesias, se encuentra a un solo trámite administrativo de ser una realidad. El que sería el barrio solar más grande del país se encuentra a la espera de que la distribuidora active los autoconsumos, un trámite para el que la empresa ya ha sobrepasado los plazos legales.

512 viviendas con más de 1500 personas implicadas, 43 instalaciones fotovoltaicas y cerca de 2000 paneles solares constituyen en Rivas el barrio solar más grande de todo el territorio nacional. Se trata de ‘La Pablo Renovable’, un proyecto comunitario que se ha venido desarrollándose durante los últimos tres años y que, actualmente, se encuentra a un solo paso de convertirse en una realidad que evitaría la emisión de un 167 toneladas de CO2 al año.

Tan solo un obstáculo separa a los vecinos y vecinas de Pablo Iglesias de ver en funcionamiento el proyecto en el que han invertido 3100€ por vivienda, pero este último trámite administrativo no depende de la comunidad ripense. Desde el colectivo explican que la empresa Unión Fenosa Distribución (UFD) del grupo Naturgy “tiene bloqueada la puesta en marcha de las instalaciones al no culminar su tramitación administrativa”.

“El 26 de enero terminó el plazo legal de 2 meses con el que contaba la distribuidora para activar los autoconsumos”, asegura a este Diario Enrique Martín, miembro del colectivo “. Por ello, La Pablo Renovable ha puesto en marcha una campaña bajo el hashtag #FenosaAhoraTeTocaAti para dar a conocer la situación del proyecto y exigir su culminación a la empresa.

Martín explica que el retraso en la activación de los autoconsumos no es un hecho fortuito, sino que es la tónica general de las distribuidoras para retrasar la implementación de proyectos colectivos. Un informe de la organización Alianza por el Autoconsumo respalda las declaraciones del vecino ripense, al recoger datos que indican que el plazo que manejan las empresas “no baja de los 10 meses, llegando a alargarse hasta los 24 meses”.

Desde La Pablo Renovable esperan que su caso no llegue a dilatarse tanto y aseguran que trabajarán para que ver su proyecto culminado a la mayor brevedad posible. “Si se prolonga demasiado haremos lo que sea necesario”, asegura Martín.

Por otro lado, al ver cercana la implantación definitiva de la comunidad energética, desde la organización han comenzado a plantearse el futuro del colectivo. “A algunos nos gustaría aprovechar el poder que tenemos como colectivo para cambiar otras realidades energéticas dentro de la comunidad”, afirma Martín. “No es lo mismo negociar mejoras en la eficiencia energética de nuestras casas de uno en uno, que presentar un proyecto que afecte a 300 viviendas”, expresa el vecino de Pablo Iglesias.