Las mediciones de los niveles de ruido en los tramos descubiertos de la línea 9B de Metro determinan que hay 5 centenares de viviendas afectadas, la mayoría en Rivas Vaciamadrid. La Comunidad descarta medidas correctoras debido a que, en ningún caso, se sobrepasan los 65 decibelios y afecta a “un número reducido de personas”.

La Comunidad de Madrid ha sometido a información pública un estudio que elabora los Mapas Estratégicos de Ruido de los tramos no soterrados del Metro, entre ellos la línea 9B a su paso por Rivas Vaciamadrid. El objetivo es determinar el impacto acústico que esta infraestructura tiene sobre edificios y personas.

En el caso de Rivas, la línea 9B atraviesa gran parte del municipio, con tramos soterrados y en superficie y con la existencia de tres estaciones (Rivas Vaciamadrid, Rivas Futura y Rivas Urbanizaciones). En este trayecto, al igual que en el resto de la línea, se han realizado diversas mediciones acústicas en diferentes momentos del día.

Además, se ha tenido en cuenta la velocidad de los trenes que, en el caso de Rivas, no pueden superar los 104 km/h en dirección Puerta de Arganda, ni los 105 km/h en sentido Arganda, con una reducción hasta los 30km/h en la estación de Rivas Vaciamadrid.

El estudio determina que, en la totalidad del trayecto, desde Arganda del Rey a Puerta de Arganda, el ruido afecta a 5 centenares de viviendas, la mayoría de las cuales se encuentran en Rivas. Además, se señala la presencia de ruido, tanto en el polígono industrial Santa Ana, como en el colegio LuyfeRivas, que se encuentra pegado a las vías del tren.

Cabe señalar que los mapas del ruido, elaborados en 2022, no tienen en cuenta la existencia de un edificio residencial de reciente construcción, situado en la calle César Manrique, nº1, que presenta una fachada orientada de forma directa hacia las vías del tren.

En total, se estima que el ruido del metro afecta en algún momento del día a 944 personas tanto dentro como fuera de Rivas, sin embargo, se descarta la necesidad de medidas correctivas.

Las conclusiones del informe señalan que se trata de “un número reducido de personas expuestas a niveles de ruido superiores a los marcados en los Objetivos de Calidad Acústica” y, en todo caso, nunca se superan los 65 decibelios. Una cifra que marca el segundo escalón inferior de dichos objetivos.

Los mapas se encuentran en fase de información pública, por lo que pueden ser consultados en el Portal de Transparencia de la Comunidad de Madrid y están abiertos a posibles alegaciones hasta el próximo 16 de septiembre.