La familia que regenta la administración de lotería nº2 de Rivas Vaciamadrid, ubicada en la plaza Pau Casals de Covibar, vive días felices. El pasado viernes 30 de agosto, un boleto sellado en su establecimiento resultó agraciado con El Millón, un premio de un millón euros, como su propio nombre indica, de la lotería Euromillones. Esa alegría se ha duplicado tras confirmar que la persona agraciada con el premio es un vecino del barrio.

El pasado sábado, un día después del sorteo, José, dueño de la administración de loterías, en la que también trabajan su mujer y su hija, contaba a este digital que creían que la persona afortunada “podría no saber todavía que su boleto ha sido premiado”.

Sus sospechas se confirmaron cuando este martes 3 de septiembre, un cliente habitual, que todas las semanas acude a la administración de lotería de Covibar, comprobó sus boletos jugados en sorteos anteriores y la máquina confirmó que uno de ellos era el agraciado con el premio de un millón de euros. “Se enteró aquí”, confirma Dunia, de la familia que regenta la administración de lotería. 

Dunia relata así la escena del momento en el que el cliente agraciado con El Millón fue consciente, cuatro días después del sorteo, de que era millonario: “El hombre se puso muy nervioso, se emocionó mucho y se abrazó a mis padres, se hizo una foto con ellos y les dio las gracias”.

El cliente ha regresado un día después, en la mañana de este miércoles 4 de septiembre, a la administración de lotería donde selló el boleto que le ha reportado un premio de un millón de euros. “Ha venido a saludarme y darme las gracias también a mí, nos ha contado que ya tiene lo del premio solucionado y nos ha dicho que no ha dormido nada en toda la noche”, cuenta Dunia.

Para Dunia y su familia, la confirmación de que el premio se queda en el barrio de Covibar es una doble alegría: “Es un cliente de siempre, una persona muy buena, trabajadora y vecino del barrio, así que si estábamos contentos por dar el premio, ahora lo estamos más aún por la persona que ha resultado agraciada”, concluye Dunia.