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Manifestación por los derechos laborales del sindicato CPPM, en 2019 (imagen: CPPM)

CPPM Rivas Vaciamadrid ha presentado un recurso de alzada contra la «obligatoriedad» de realizar un curso sobre violencia de género que se está impartiendo estos días entre la plantilla de Policía Local. Argumentan que «tiene un carácter obligatorio injustificado» y que se trata de una «imposición» por parte del Gobierno local —que obliga a todo el personal municipal a formarse en esta materia—, además de que «no se está impartiendo respetando los derechos de los trabajadores», aunque, aseguran, lo consideran «necesario y muy importante» para el desempeño de su labor. El alcalde, Pedro del Cura, por su parte, insiste en que es «obligatorio» y en que el Gobierno local «no va a permitir que en Rivas haya policías que se nieguen a formarse sobre violencia de género«.

CPPM Rivas entiende que la participación en esta formación sobre violencia de género debería ser «voluntaria» al considerar que su carácter obligatorio es «injustificado». «La imposición no era necesaria, y eso es lo que nos ha crispado, ya que todos los agentes quieren realizar ese curso», añaden.

Así, y según el sindicato CPPM, «hemos presentado este recurso por la imposición del Gobierno municipal, ya que según la normativa no pueden obligarnos a hacerlo». Según argumentan, «hemos recibido quejas de agentes que han sido obligados a participar en las sesiones formativas, que se distribuyen en tres días, en su día libre o por la mañana tras haber trabajado en el turno de noche, lo cual atenta contra su conciliación y su descanso. Además, se trata de grupos muy numerosos y cuando se imparte se ve mermado el servicio, ya de por sí insuficiente por la escasez de plantilla municipal».

El Gobierno local insiste: «es un curso obligatorio»

El alcalde, Pedro del Cura, considera el recurso presentado por el sindicato policial «como una suerte de pin policial» con el que «no creemos que se sienta representado este colectivo», ya que «es llamativo que casualmente no hayan recurrido otros cursos de formación». «Estamos acostumbrados a que CPPM plantee sus posiciones sobre asuntos de ciudad, no estrictamente laborales, y una cosa es la legitimidad de solicitar las mejoras que consideren oportunas en cuanto a sus condiciones de trabajo, pero otra muy distinta es impugnar un curso sobre un asunto tan serio como este. No hay motivo que genere tantas víctimas mortales como la violencia machista«, añade Del Cura.

El regidor reitera que «el curso es obligatorio y este gobierno ha realizado una apuesta muy fuerte por la formación de toda la plantilla municipal a través de la Concejalía de Feminismos. Todos los policías que desempeñan su labor en la calle deben saber detectar los casos de violencia de género para intervenir y proteger a las mujeres que los sufren, y no vamos a permitir ninguna suerte de ‘objeción de conciencia’ con este asunto«. «Si hay policías que se niegan a formarse sobre violencia de género, tendremos que actuar», añadió.

Desde el sindicato policial insisten en que, para ellos, «se trata de un tema laboral y de imposición, ya que por supuesto que estamos encantados de hacer ese curso que, por desgracia, es muy necesario para abordar una problemática que nos encontramos con mucha frecuencia; pero no creemos que las formas hayan sido las adecuadas».

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