El San Juan republicano

Nací en esa tierra en la que no creemos en las meigas aunque sabemos que habelas hailas. En esa tierra, donde como en tantas otras, la noche de San Juan es mágica. Recuerdo desde bien pequeño organizar nuestra hoguera, con la familia primero, y después, a medida que iba haciéndome mayor, con los amigos. En esas hogueras quemábamos mucho más que leña, ardía todo aquello que considerábamos que no nos había aportado nada bueno durante el año, comenzando así una nueva etapa, libre de cargas, que normalmente habían sido más bien, producto de la testarudez humana que de la lógica. Esa noche eran decenas, quizás cientos de hogueras las que ardían, alrededor de la cuales se sentaban y saltaban, diferentes núcleos familiares u otros grupos de personas que por cualquier otro motivo en común decidían juntarse para dicha celebración.

A lo largo de la noche recibías la visita de vecinos y vecinas que se dedicaban a recorrer las diferentes hogueras, e incluso te ausentabas de tu propio núcleo para visitar las del resto, sin duda ese era el mejor momento de la noche. Nunca me llegué a plantear si hubiese sido mejor, o en que hubiese cambiado el celebrar una única hoguera en lugar de dividirse en diferentes puntos de celebración. Supongo que no habría sido mejor ni peor, simplemente diferente. A veces nos empeñamos en ver el vaso medio vacío, cuando en realidad está medio lleno. Buscamos en lo que nos diferencia la división y/o el conflicto cuando deberíamos de ver más allá, priorizar los objetivos y entender las diferencias como una oportunidad para poder hacer realidad dichos objetivos.

Este año, varios colectivos de Rivas han organizado en el mismo día diferentes fiestas de temática republicana, no voy a negar que hubiese sido muy bonito que las diferentes organizaciones hubiesen llegado a un entendimiento y se organizase únicamente un festejo multitudinario, pero tampoco entiendo que se pueda criminalizar esa falta de entendimiento e incluso vender como si se tratase de una escena de La Vida de Brian.

Me niego rotundamente a considerar la pluralidad como un problema en lugar de parte de la solución y para ello creo que es importante tener la capacidad de diferenciar el contexto del contenido, la estrategia de la táctica o el cómo del qué. Para quienes creemos en la República como un sistema organizativo del Estado más eficiente que la Monarquía, quizás el verdadero problema de la celebración de estas jornadas, tanto en Rivas como en el resto del país, no sea la existencia de diferentes festejos en lugar de solamente uno, sino que ese día no existan, para recorrer, tantas actividades reivindicando la República como hogueras de San Juan.

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